Programa DREAMS, Kenia, 2016-2019

El programa DREAMS (Decididas, Resilientes, Empoderadas, Libres de SIDA, Asesoradas y Seguras; por sus siglas en inglés) fue desarrollado en respuesta a las tasas desproporcionadamente altas de infección por VIH entre niñas adolescentes y mujeres jóvenes de 15 a 24 años en África subsahariana. Debido a distintos factores, como las oportunidades educativas y económicas limitadas y violencia de género, las niñas adolescentes y mujeres jóvenes en la región tienen de 2 a 3 veces más probabilidades de vivir con VIH en comparación con sus pares masculinos. En Kenia, las adolescentes y mujeres jóvenes representan casi la mitad de las nuevas infecciones entre mujeres mayores de 15 años.

De acuerdo con hallazgos clave de la Encuesta de Violencia contra Niñas, Niños y Adolescentes (VACS, por sus siglas en inglés) en Kenia de 2019: 

• El 15,7% de las niñas experimentan violencia sexual en la infancia.
• Entre las niñas que experimentaron violencia sexual en la infancia, el 41,3% se lo contó a alguien, el 12,5% buscó ayuda y solo el 10,7% recibió servicios.

De 2015 a 2025, DREAMS en Kenia, implementado a través de Afya Ziwani (PATH) con financiamiento del Plan de Emergencia del Presidente de los Estados Unidos de América para el Alivio del SIDA (PEPFAR, por sus siglas en inglés), abordó los múltiples factores de riesgo que enfrentan las niñas adolescentes y mujeres jóvenes en los condados con alta carga de VIH, como Nairobi, Kisumu y Homa Bay. 

DREAMS es un programa de prevención multisectorial que integra intervenciones dirigidas a factores individuales, comunitarios y sociales que influyen en el riesgo de VIH, incluida la violencia sexual. Prioriza la educación, el empoderamiento económico y la mentoría, junto con la prevención y respuesta a la violencia, para crear entornos seguros y propicios para las niñas adolescentes y mujeres jóvenes en riesgo. 

El programa utiliza un enfoque de múltiples intervenciones integradas, garantizando que las beneficiarias reciban múltiples servicios complementarios adaptados a sus necesidades específicas. Los socios implementadores incluyen organizaciones comunitarias, centros de salud y escuelas.

DREAMS se implementa mediante un paquete central integral de intervenciones [1] que busca abordar múltiples factores de riesgo y reducir la infección por VIH a través de:

• Empoderar a las niñas adolescentes y mujeres jóvenes y reducir su riesgo de VIH mediante el desarrollo de activos sociales (por ejemplo, creación de redes de confianza a través de mentoría y espacios seguros), subsidios educativos y desarrollo de habilidades socioeconómicas, así como atención de salud sexual y reproductiva adaptadapara jóvenes, atención posviolencia y acceso a pruebas de VIH, tratamiento y profilaxis previa a la exposición (PrEP).
• Fortalecer a las familias mediante programas para madres, padres y cuidadores, incluidos módulos dedicados a la reducción de la violencia sexual.
• Movilizar a las comunidades para el cambio, incluso a través de programas escolares de prevención del VIH y la violencia, y programas comunitarios como SASA! y MTV Shuga que buscan prevenir la violencia y reducir conductas de riesgo relacionadas con el VIH.
• Reducir el riesgo entre parejas sexuales mediante servicios de prueba y tratamiento del VIH.

En el condado de Kisumu, Kenia, mentoras capacitadas ofrecieron intervenciones en espacios comunitarios seguros junto con entidades proveedoras de servicios especializados. Cada joven recibió mentoría regular y un paquete integral de servicios de apoyo, con énfasis en la prevención de la violencia [2].

Evaluación y resultados del programa

Para evaluar el impacto de diversas combinaciones de intervenciones de DREAMS en los resultados relacionados con el VIH en el condado de Kisumu, Kenia, Mathur et al. [2] utilizaron el análisis de árbol de clasificación y regresión para examinar datos de encuestas entre niñas adolescentes y mujeres jóvenes que llevaban de 14 a 16 meses en el programa. Los resultados muestran que, junto con la participación comunitaria en MTV Shuga y SASA!, la exposición a diversas combinaciones de intervenciones integradas conduce a mejoras en la prevención del VIH y la violencia:  

Estos hallazgos resaltan la importancia de combinar intervenciones, en particular educación, participación de madres y padres, prevención de violencia de género y estrategias de prevención del VIH para maximizar el impacto.

Desafíos

• Resistencia cultural: En algunas comunidades, las normas de género arraigadas ha dificultado la aceptación del programa.
• Limitaciones de recursos: La alta demanda de servicios ha sobrecargó la capacidad del programa.
• Brechas de datos: Los sistemas de monitoreo y evaluación requieren fortalecimiento para captar impactos a largo plazo [1].

Lecciones aprendidas

• Participación comunitaria: Involucrar a personas líderes locales y familias favoreció la aceptación y sostenibilidad [1].
• Servicios integrados: La combinación de intervenciones comunitarias, educativas y de crianza se asoció con una reducción del riesgo de violencia sexual [2].
• Enfoques adaptados: Abordar las necesidades únicas de las niñas adolescentes y mujeres jóvenes en distintos contextos garantizó una mejor alineación y resultados del programa.
• Reclutamiento y retención: Identificar e inscribir a las niñas adolescentes y mujeres jóvenes más vulnerables, como aquellas fuera del sistema escolar, puede resultar difícil. Esto es especialmente desafiante entre mujeres jóvenes de 20 a 24 años, ya que pueden tener múltiples responsabilidades laborales y de crianza, entre otras [1].